¿Estás planeando un viaje a Georgia? ¡Lo bien que hacés! Ya te vas a enterar por qué lo decimos. Para ayudarte en la organización y durante tu viaje, armamos esta guía completísima sobre qué ver en Georgia.
Este rincón montañoso del Cáucaso es poco tenido en cuenta por el turismo, y en parte por eso es que nos sorprendió tanto durante el mes que estuvimos recorriéndolo a dedo. Nuestras expectativas no eran las más altas; llegamos movidos por la curiosidad que nos lleva a querer conocer esos lugares de los que poco se habla y, como a muchos viajeros también les pasó, nos fuimos habiendo conocido un país que quedó en nuestros corazones y siempre recomendamos.
Justamente eso es lo que hacemos en este post: te compartimos todos los lugares en los que estuvimos durante nuestro viaje. Cargado de información sobre qué ver en Georgia, alojamiento, costos, consejos mochileros y mucho más…

Qué ver en Georgia: Itinerario de viaje
Qué ver en Georgia: Itinerario de viaje
Tabla de contenidos
Nuestro lugar preferido: Mestia y alrededores.
Una comida: badrijani (pasta a base de nueces y ajo envuelta en berenjena)
Cambio aproximado: USD 1 = Lari 3 (cambio del día en xe.com)
Información útil: Visa para viajar a Georgia y Abjasia
(Pasa el mouse sobre los círculos rojos para ver el nombre del destino)
Este artículo no pretende ser completamente objetivo. Toda la información está basada en nuestra propia experiencia, sobre las cosas que vimos, vivimos y sentimos. La opinión de cada uno de los lugares es totalmente personal.
Qué ver en Georgia: Tbilisi (Tiflis)
La primera impresión, especialmente la que te da el primer lugar al que llegás en un país que nunca habías estado, suele dejar una sensación que marca el resto de tu viaje. Por lo general no tiene grises: o te encanta todo y querés seguir recorriendo, o querés escapar de ahí. Y esto se intensifica cuando se trata de ciudades, que con su vorágine nos dan menos tiempo para adaptarnos a lo nuevo.
Viniendo desde Armenia, Tbilisi fue nuestra entrada a Georgia, y es muy probable que sea la tuya también. Lo que nos recibió, podemos resumirlo así: tanto nos enamoró, que esos 365 días sin necesidad de visa que te permite Georgia nos tentaron a quedarnos mucho más tiempo del planeado.
Tbilisi (aunque en español se la sigue llamando Tiflis, nombre que Georgia cambió en 1936), es una ciudad relajada, de buena comida, buen vino y callejones nostálgicos de nenes jugando en la vereda y casas que resisten al cambio de siglo.
Qué ver en Tbilisi (Tiflis)
(Tocá en la flecha del margen superior izquierdo para ver todas las referencias)
♦ Barrio viejo de Tbilisi

Barrio viejo de Tbilisi con el Fuerte Narikala de fondo
Caminar por las callecitas del barrio viejo de Tbilisi entre la arquitectura típica del S. XIX es la razón por la que nos gustó tanto la ciudad. Es un viaje en el tiempo que te lleva a retroceder imaginariamente varias décadas, cuando las casas de dos pisos con balcones que parecen a punto de desmoronarse ocupaban la mayor parte de la capital de Georgia.
Como pasa frecuentemente en estos barrios, lo que hasta hace poco era visto como algo viejo y sin valor empieza a transformarse en la zona de los artistas, los hipsters y los turistas que le ven el lado pintoresco, apareciendo algunas galerías, cafés y casas reconvertidas en pequeños hoteles, pero manteniendo la esencia.
Dónde: podés caminar sin rumbo por toda la zona que está entre las calles Lado Asatiani, Polikarpe Kakabadze, Kote Makashvili y la Avenida Rustaveli, aunque no se limita solo a esto.
♦ Fuerte Narikala y Monumento Kartlis Deda

«Madre Georgia» nos protege desde lo alto
La subida es empinada y cansadora, pero cuando llegues al Fuerte Narikala vas a tener una gran recompensa. Del fuerte en sí no queda mucho, pero es la espectacular vista de la ciudad lo que paga tu esfuerzo.
Y ya que subiste, podés caminar un poco más después del descanso hasta el enorme monumento Kartlis Deda, que está a unos 500 metros bordeando el botánico. La «Madre Georgia» te espera para recibirte con una copa de vino en la mano como buena georgiana, mientras que en la otra tiene una espada para espantar a los enemigos.
Si te gustó la idea de caminar por la colina y estás con las pilas cargadas, podés seguir hasta el Parque Mtatsminda. Son 3 kilómetros más acompañado de verde y vistas panorámicas. Desde el parque podés bajar al corazón del barrio viejo terminando tu paseo por las alturas.
♦ Barrio Abanotubani
En la zona que está a los pies de la colina por la que se sube al Fuerte Narikala vas a ver varias construcciones de ladrillo con techos redondeados. Todos estos son hamams (baños termales), una institución histórica de Tbilisi. Por más que no vayas a uno, el barrio Abanotubani es hermoso para pasear.
Si no sabés de qué se trata el «baño turco», podés leer nuestra experiencia en un hamam de Estambul.
En estas calles también está la Mezquita Central, que se puede visitar fuera de los horarios de rezo. Si ya estuviste en otras mezquitas de países musulmanes no te va a parecer la gran cosa, pero si no, es la oportunidad para entrar a una.
♦ Orillas del Río Kurá

Parque Rike visto desde el Fuerte Narikala
La orilla del río Kurá, especialmente entre el Puente de la Paz y el Puente Metekhi, es el lugar perfecto para caminar a la noche ya que está cargado de bares, restaurantes y cafeterías.
Acá te vas a encontrar con un monumento que solo podría estar en Georgia: el tamada (maestro del brindis). Sí, aunque te suene raro, en toda reunión georgiana se designa a alguien de la mesa como tamada, que es quien dice unas palabras muy profundas antes de cada brindis. Y no creas que esto se hace una o dos veces en la noche ni que se toma como un chiste, sino que nadie toca su copa de vino, en ningún momento, sin que antes el «maestro del brindis» de una buena razón para hacerlo. No importa si es una juntada informal entre dos amigos o un casamiento, siempre uno de ellos tendrá la responsabilidad de ser el tamada.
De la importancia ritual que se le da al vino y al tamada en Georgia, y nuestra experiencia con esta tradición, hablamos en el libro Eliminando fronteras.
Del otro lado del río está el Parque Rike, ese que se ve con sus estructuras modernosas cuando subís al Fuerte Narikala. La más llamativa, formada por dos tubos, es una sala de conciertos, algo así como el Opera House de Georgia.
♦ Vake
Entre las avenidas Chavchavadze y Abashidze, está una de las zonas más «top» de Tbilisi.
Desde ya que no tiene el ambiente del barrio viejo; acá todo está más limpio y prolijo, pero si querés ver una parte de la ciudad de casonas, parques y negocios de lujo, podés darte una vuelta por Vake.
♦ Catedral Sameba (Santísima Trinidad)

Qué ver en Georgia: Catedral Sameba
¿Por qué interesarse en una catedral construida en 2002 cuando estás en la región de las iglesias milenarias? Quizás porque es la más grande del país, y porque al estar frente al barrio Vake te da una doble razón para pasear por esta zona.
♦ Mercados
Si estás un domingo en Tbilisi no te pierdas el mercado de antigüedades -y cachivaches- que se arma a la orilla del río (Dry Bridge Market). Vas a encontrar desde reliquias soviéticas y objetos militares hasta electrónica usada y porquerías chinas.
Si te gusta pasear por mercados para ver la vida local lejos del turismo, el Mercado Central (Dezerter Bazar) es el lugar para vos. Es el más grande e importante de la capital, donde vas a encontrar de todo a precios más económicos que por el centro. No está nada orientado a turistas aunque podés conseguir algunos suvenires si es lo que buscás.
¿Qué son esas «velas» o «chorizos plastificados» que hay colgando en varios puestos? Se llaman churchkhela y son una especialidad del Cáucaso que no extrañamos para nada. Las hacen atando nueces a un hilo y sumergiéndolas en una mezcla espesa de jugo de uva y harina, que después cuelgan para dejar secar.
Está a unos 3 – 4 kilómetros del centro, por lo que podés llegar caminando o también hay una parada de bus en la entrada.
♦ Comida

Platazo del deleite nacional: khinkali
Amamos la comida georgiana, para nosotros de las más infravaloradas del mundo, así que seguramente vas a comer bien sin buscar demasiado. Estos son solo tres lugares que nos gustaron y podemos recomendarte:
Klike’s Khinkali: los khinkalis son la versión georgiana de los dumplings («empanaditas» al vapor). En este subsuelo hay variedad y sabor.
Machakhela: otro clásico de la gastronomía de Georgia son los khachapuris, que son panes rellenos de queso. El más buscado es el Adjarian/Adjaruli khachapuri, una bomba de queso, manteca y huevo, pero en el menú de esta cadena de restaurantes hay muchos para elegir.
Luca Polare: dependiendo de qué parte del mundo vengas, puede que para vos sea solo una buena heladería. Para nosotros, después de viajar durante varios años seguidos por Asia, encontrarnos con uno cremoso como los que tanto extrañábamos de Buenos Aires fue un placer inesperado.
No te pierdas nuestro top 10 de platos preferidos de Georgia y los que no extrañamos en el post Comida de Georgia: lo que no deberías dejar de probar en tu viaje.
Alojamiento
Durante la semana que estuvimos en Tbilisi nos quedamos en dos lugares distintos, ambos por las calles del barrio antiguo. Quedarte en alguna de las casas de esta zona es excelente, porque además de estar en una ubicación céntrica, vas a poder experimentarlo desde adentro y no solo como un paseo.
El primer lugar en el que estuvimos fue por medio de Couchsurfing, donde tuvimos una experiencia fantástica que nos dejó muchas enseñanzas, y de la que hablamos en el libro Eliminando fronteras.
También en una casona reconvertida en hostel: Terrace Hostel, pero hay muchas opciones más a muy buenos precios, como Guesthouse Sabina, que nos la recomendaron varios viajeros (no tiene nada que ver con Joaquín, Sabina es el nombre de la dueña).
Comparando precios en Booking, Agoda y Hostelworld vas a encontrar muchas ofertas.
🌏 Intercambio de trabajo por alojamiento: si querés quedarte algunas semanas en algún lugar de Georgia u otro país, podés ver la posibilidad de hacer intercambio de trabajo por alojamiento. En la plataforma Worldpackers hay muchas propuestas en distintos destinos. Ingresando a este link y colocando el código MARCANDOELPOLO vas a tener USD10 de descuento en la membresía anual.
❤️ Colaborá con Marcando el Polo: si reservás tu alojamiento a través de Booking, Agoda o Hostelworld desde estos o alguno de los links que compartimos, estás dando una mano enorme para que el blog siga funcionando. No hace falta que sea nuestro recomendado, con cualquiera que reserves sirve (incluso de otros países). Desde ya que los precios son los mismos.
⛑️ Viajá asegurado/a: siempre recomendamos que tengas un seguro de viajes. Para decidirte por cuál, pasá por Lo que tenés que saber antes de contratar un seguro de viaje.
Kazbegi (Stepantsminda)
Saliendo de Tbilisi en línea casi recta hacia el norte, vas a llegar a la frontera con Rusia, pero unos kilómetros antes está uno de los principales destinos turísticos de Georgia: Kazbegi (renombrada Stepantsminda aunque más conocida por el antiguo nombre).
La razón de su fama entre los viajeros es el espectacular entorno de montaña que rodea al pueblo, coronado por el pico nevado del Monte Kazbek, de más de 5000 metros. Como imaginarás, hay muchas oportunidades para hacer trekkings y caminatas por este paisaje sublime.

Iglesia de Guergueti a la vista
Qué ver en Kazbegi (Stepantsminda)
♦ Iglesia de Guergueti
La caminata hasta la Iglesia de Guergueti ya es motivo suficiente para que Kazbegi esté en tu itinerario.
Aunque muchos suban en los taxis 4×4 que salen del centro del pueblo, te recomendamos que para vivir la experiencia completa y apreciar mucho más el paisaje, hagas la caminata de 4 kilómetros, porque la satisfacción de llegar a los 2200 metros y encontrarte con la iglesia a la vista no tiene comparación con sentarte en una camioneta y bajar en destino.
Hay cuatro caminos distintos hasta la iglesia, dependiendo de cuál elijas deberías tardar de 1 a 2 horas en llegar. Te recomendamos seguir el que explica este artículo para no ir por el más empinado.
Importante: para entrar a la iglesia los hombres tienen que llevar pantalón largo y las mujeres la cabeza cubierta.
♦ Valle de Sno

Entrando al Valle de Sno (sí, lo que cruza la calle es un caño de gas)
Poco antes de llegar a Kazbegi, viniendo desde Tbilisi, hay un desvío que sigue el curso del río Snotskali pasando por pueblitos a los pies de la montaña.
Los principales pueblos del valle son Sno y Juta. Es un recorrido ideal para tomarte un día entero o, si tenés tiempo, pasar la noche en Juta y volver a Kazbegi al día siguiente.
Cuando pases por Sno, frená antes de la entrada al pueblo para ver lo que algunos llaman «los moai georgianos«. Digamos que es bastante cómica la comparación con la Isla de Pascua, pero el punto es que hay cuatro esculturas de cabezas talladas en piedra que representan a grandes poetas nacionales, hechas por un artista local.
En el centro del pueblo hay una estatua al Rey Vajtang Gorgasali, pero el gran atractivo es la torre que quedó en pie del antiguo castillo, al que podés entrar y tener una muy buena vista de los alrededores.
Al final del camino por el valle está Juta, desde donde podés hacer el fantástico trekking al Paso Chaukhi (entre 4,5 y 6 horas ida y vuelta). Y si tenés una carpa, mejor todavía, porque hay lugares para acampar tanto en Juta como en la montaña antes de llegar al Paso. Desde ya que dormir en la montaña es alucinante cuando el clima acompaña y si estás bien preparado, pero lo bueno de hacerlo en el pueblo es que podés dejar todo el equipaje y subir solo con algo para comer.
El camino sigue hacia los pueblos que están del otro lado de la montaña, pero cruzando Chaukhi ya es mucho más empinado y difícil de seguir.
♦ Comida
Kazbegi no es el lugar de Georgia donde mejor vas a comer, pero hay un pequeño restaurante que se llama Kazbegi Good Food que le hace honor a su nombre. Tiene varias opciones vegetarianas.
Alojamiento
Nosotros buscamos una habitación cuando llegamos a Kazbegi, donde no faltan las familias que le alquilan a turistas, pero reservando con anticipación podés encontrar muy buenos precios buscando en Booking, Agoda, y Hostelworld.
La casa en la que nosotros nos quedamos la vas a encontrar siguiendo estas instrucciones:
Desde la plaza principal, tomá la calle que en el cartel dice “centre”. Cuando llegues a la primera esquina, doblá a la derecha. Es la casa de puerta gris a mano izquierda (si no la pintaron de otro color). Preguntá por Vaka, que según lo que entendimos es la dueña de la casa, y su marido se llama «Abto» o algo así.
El primer precio que nos dijo fue 20 Lari por persona, pero negociando por tres noches quedamos en 25 entre los dos por noche.
Si conocés a alguien que hable georgiano o ruso, podés pedirle que llame al 599551578 para avisar que vas.
Borjomi

De acá viene la famosa agua Borjomi
Viajando por Georgia vas a encontrar que en todos los restaurantes y negocios venden un agua en botella de vidrio que lleva el nombre de esta ciudad. Tanto la vas a ver que en algún momento seguramente quieras probarla, y con el primer sorbo te vas a llevar la sorpresa de que es muy distinta a cualquier otra. O estás de su lado o no volvés a tomarla.
En toda la región, Borjomi es sinónimo de aguas minerales curativas; de acá viene la que se embotella y hacia acá vienen los turistas con bidones en busca de la fuente original de la juventud eterna… bué, tampoco es mágica, pero tiene la reputación de casi serlo. Y aunque los años gloriosos de la época soviética ya pasaron, sigue siendo un destino preferido por el turismo local.
No diríamos que la consideramos una prioridad si tenés poco tiempo en Georgia, como a Tbilisi, Kazbegi o Mestia, pero si no tenés apuro está muy bien para pasar una o dos noches. Es una ciudad chica y con mucho verde para relajarte.
Qué ver en Borjomi
♦ Central Park

Qué ver en Georgia: Piletas de agua mineral en el Parque de Borjomi
He aquí, la vertiente misma de uno de los tesoros más preciados de Georgia: el agua que no podía faltar nunca en la mesa de Stalin.
Apenas entres al parque vas a encontrarte con la fuente original donde descubrieron el agua mineral y razón por la que se fundó Borjomi en 1829 (es la que está cubierta por una glorieta con techo de vidrio). Antes de entusiasmarte llenando tu botella para irte de caminata por el parque, mejor probala, porque al ser de origen volcánico es salada, azufrosa y está tibia. Y no creas que por haber probado la embotellada ya sabés a lo que vas, porque la pura es mucho más fuerte.
La primera parte del parque está llena de bares y juegos para la familia dominguera, pero no te decepciones, que si seguís caminando el cemento cambia por naturaleza, y los nenes que le piden a la mamá una vuelta en la calesita por pájaros.
Si querés zambullirte en el agua mineral, a 3 kilómetros de la entrada hay piletas para bañarte.
Entrada al parque 2 Lari.
♦ Parque Nacional Borjomi Kharagauli
Ocupando 8% de todo el territorio de Georgia, es el parque nacional más grande del país.
En la entrada (23 Meskheti St.) hay una oficina en la que te van a dar un permiso gratuito y un mapa con las rutas y refugios. Hay muchas caminatas para hacer, desde algunas de varios días hasta otras de algunas horas como hicimos nosotros.
Si querés pasar la noche en el parque, tenés que pedir un permiso de acampe (5 Lari por persona) o para usar los refugios (10 Lari). Los refugios tienen agua potable pero tenés que llevar tu comida y bolsa de dormir (podés alquilar en la entrada si no tenés).
Más información en la web oficial del parque.
♦ Fuerte Gogia
Desde el centro de Borjomi podés caminar hasta el Fuerte Gogia, no tanto por el fuerte en sí, del que no queda más que las ruinas de la torre y la muralla, sino por la vista a la ciudad que hay desde acá arriba.
Si querés una vista todavía mejor, seguí subiendo por el camino que sale desde la casita que está cerca del fuerte. Después de una empinada subida vas a llegar a las cruces que de noche están iluminadas.
Alojamiento
En Borjomi tuvimos nuestra única experiencia negativa haciendo Couchsurfing, de la que te contamos en el capítulo «Cuando Couchsurfing sale mal» del podcast Viaje al Planeta Tierra.
Nuestra idea original era acampar en el Parque Nacional, lo que seguramente hubiese sido una mucho mejor idea (ver información arriba).
Si llegás sin nada reservado, podés pasar por el Centro de información turística que tienen información sobre casas de familia que alquilan habitaciones. Si querés reservar con anticipación, en Booking, Agoda y Hostelworld hay muchas opciones.
Qué ver en Georgia: Zugdidi
Zugdidi no es de las ciudades más lindas que vayas a ver en Georgia, pero sirve de base antes de cruzar a Abjasia, si vas a seguir hacia el norte para Mestia o para recorrer Samegrelo, una región de espectacular belleza natural.
Por la zona vas a ver mucha presencia de Naciones Unidas, lo que tiene que ver con la cantidad de refugiados que llegaron en los 90 durante la Guerra de Abjasia.
Qué ver en Zugdidi
♦ Si vas a estar en Zugdidi más que de paso hacia otro lugar, en el Centro de Informes que está sobre la avenida principal (Rustaveli St.) nos dieron mapas y muy buena data sobre lugares para visitar en los alrededores.
♦ Jardín Botánico

Qué ver en Georgia: Palacio Dadiani en el Jardín botánico de Zugdidi
Algo así como «Los Bosques de Palermo» pero de Zugdidi; este enorme parque es el lugar al que las familias vienen a hacer un picnic, los tortolitos a caminar de la mano y los grupetes de amigos a tomar mate… o bueno, una lemonade fluorescente de esas que tanto gustan por acá.
Paseando por el parque en algún momento vas a ver una casita muy simple en forma de castillo: el Palacio Dadiani. Lo que hoy es un museo fue la mansión de esta familia, lords de la región de Samegrelo.
Nosotros no entramos, pero es verdad que su exhibición más famosa, una máscara mortuoria de Napoleón que llegó por el matrimonio entre un Dadiani y una descendiente de la hermana de Napo, nos tentó un poco (solo un poco).
La entrada al parque es gratis. Museo 5 Lari.
♦ Mercado Central
Sobre Rustaveli St., antes de cruzar el mugriento río, está el Mercado Central de Zugdidi. Muchos georgianos de Abjasia vienen a comprar y vender en el mercado, cruzando la frontera todos los días.
Lo que más nos llamó la atención es que tanto acá como en los puestos que están en la terminal de marshrutkas, muchos vendedores todavía usan el ábaco para las cuentas.
♦ Skuri y Mukhuri

Agua helada para un chapuzón en Skuri
Lo mejor de Zugdidi está cuando te alejás de la ciudad y recorrés los alrededores. Un paseo por el día que nosotros hicimos a dedo fue a Skuri y Mukhuri.
En Skuri hay un pequeño monasterio del Siglo X, que estaban renovando cuando nosotros fuimos pero lamentablemente no con el mejor sentido estético.
Pasando la iglesia hay una vertiente de agua mineral, que no tendrá la fama de la de Borjomi, pero si nos das a elegir preferimos cargar la botella en esta que no es tan «volcánica».
Antes de llegar al monasterio vas a pasar por un puente que cruza el río. Del otro lado del puente se puede bajar a una pileta natural, ideal para un chapuzón si aguantás el agua helada.
A 10 kilómetros de Skuri, está Mukhuri (volviendo hacia Zugdidi en «round trip»). En ambos casos el plan no debería ser llegar a estos pueblos en busca de algo en concreto, sino para relajarte disfrutando de la belleza natural.
Mukhuri es el punto de partida más usado para el duro trekking de 4-5 días hasta Khaishi, cruzando las montañas Egrisi que separan las regiones de Samegrelo y Svaneti. La gran estrella del recorrido es el fantástico Lago Tobavarchkhili (Lago Plateado).
Empezando en Skuri el trekking es más corto, pero según dicen los que hicieron ambos, menos escénico.
En esta página hay una guía muy buena para hacer el trekking completo empezando en Mukhuri, y en este link para hacerlo desde Skuri.
♦ Fuerte Rukhi
Si querés salir de la ciudad pero sin irte tan lejos, a solo 7 km. de Zugdidi y a metros de la frontera con Abjasia están las ruinas cubiertas por vegetación del Fuerte Rukhi, levantado en 1647 por los Dadiani.
No hay nadie que cuide el lugar por lo que la entrada es gratis. Desde el fuerte hay muy buena vista a la conflictiva región que está del otro lado del río.
[su_youtube url=»https://youtu.be/-3VKBNkWeGs» width=»640″ height=»440″]
Cuando salimos de Zugdidi camino a Skuri y Mukhuri nos frenó un cantante de ópera. Fue uno de los regalos que nos dio el viajar a dedo por Georgia.
Alojamiento
Zugdidi Hostel es donde nos alojamos nosotros. Está a 1 kilómetro aprox. del centro en una zona muy tranquila… bué, el centro de Zugdidi tampoco es Tokio.
Unos viajeros españoles que conocimos se quedaron en Shorena’s House y estaban encantados. Es la casa de una señora muy buena onda que alquila habitaciones a buen precio, y por lo que vimos tiene excelentes referencias.
En Booking, Agoda y Hostelworld vas a encontrar muchas más ofertas de alojamiento.
Qué ver en Georgia: Abjasia
Considerado como un país independiente solo por Rusia y cinco aliados más (Nicaragua, Venezuela, Siria, Nauru y Vanuatu), pero como territorio de Georgia ocupado por el ejército ruso por el resto del mundo; Abjasia es una de las porciones del Cáucaso que quedaron en un limbo político con la caída de la Unión Soviética.
Es posible entrar como turista a Abjasia desde Georgia o desde Rusia, pero no podés seguir tu viaje hacia el otro país. Es decir, que si entrás desde Georgia tenés que volver a este y lo mismo haciéndolo desde Rusia.
La visa de turismo te la dan en un papel aparte y tu visita no va a traerte ningún problema en las fronteras.

Bienvenido al ¿país? de Abjasia
Si estás planeando viajar a Abjasia, estos tres artículos son esenciales:
Guía para viajar a Abjasia
Visa para viajar a Georgia y Abjasia
Países que (casi) no son países: Abjasia
Cómo llegar a Abjasia desde Georgia (Zugdidi)
Nosotros hicimos todo el recorrido desde Zugdidi hasta Sujumi a dedo sin demasiadas complicaciones, pero hay otra opción:
Desde Zugdidi podés tomar un taxi hasta Enguri Bridge (10 km.), que es donde está el puesto de control georgiano. Una vez que pases el control, hay carros tirados por caballos que cruzan a la gente por el puente, pero no hace falta que los tomes, son unos 500 metros que podés caminar y no seguir apoyando el maltrato animal.
Del otro lado del puente vas a llegar al puesto de control ruso. Una vez que te hayan dejado entrar y sueltes la respiración contenida, vas a encontrar marshrutkas (camionetas compartidas) a Gali, que es el pueblo desde donde salen los buses a Sujumi (capital de Abjasia).
Esta frontera se llama Inguri.
Jvari

Acampando a orillas del río en Jvari
Jvari no fue un lugar en el que frenamos para ver algo, sino porque encontramos un lugar perfecto para acampar a mitad de camino en nuestro viaje a dedo de Sujumi (Abjasia) a Mestia.
Ese rinconcito perfecto cerca del río lo habíamos visto unos días antes haciendo la vuelta por Skuri y Mukhuri, y lo anotamos para tenerlo en cuenta porque sabíamos que en el algún momento podíamos necesitarlo.
Y no solo fue nuestro camping esa noche, sino también a la vuelta para cortar el viaje de Mestia a Batumi. No es que la distancia en sí fuera muy larga (265 km.), pero queríamos aprovechar para salir más tarde de Mestia y llegar temprano al día siguiente a Batumi.
Qué ver en Jvari
♦ Represa Enguri
Dijimos que no es un lugar al que hayamos venido a ver algo en particular, pero si ya encontraste un buen lugar para dejar la carpa y tenés tiempo, podés hacer dedo hasta la Represa Enguri, la más grande del Cáucaso y que genera casi la mitad de toda la energía eléctrica del país.
Para llegar hay que tomar el desvío que sale de la ruta principal, unos 5 km. después de Jvari. El auto queda en la entrada y tenés que caminar unos metros hasta el mirador. También hay un café con excelente vista antes del mirador.
Alojamiento
Si querés pasar una noche en nuestro rinconcito de acampe, está apenas termina Jvari (viniendo desde Zugdidi). Ni bien cruzás el puente que pasa el río Magana, podés bajar a la orilla donde hay espacio de sobra para poner tu carpa (ver mapa).
No esperes que sea como acampar en el Lago Tobavarchkhili, pero está en un punto conveniente de la ruta si tenés tu carpa y no querés entrar a una ciudad para pasar la noche.
Mestia
Nuestro destino preferido en Georgia, Mestia es un pueblo a los pies de las montañas pegado a la frontera con Rusia, que empezó a crecer en infraestructura a medida que el turismo fue encontrando su belleza.
Hoy Mestia ya no es la aldea sacada de un cuento medieval que era hasta antes del aeropuerto y los hoteles, pero las míticas torres de defensa siguen estando, las montañas y glaciares también, y los osos siguen asustando humanos… bueno, al menos eso nos pasó a nosotros.

Qué ver en Georgia: caminando por Mestia
Qué ver en Mestia
Sí, ya sabemos que con Marcando el Polo tenés info de sobra, pero igualmente podés pasar por el Centro de Informes que está en la plaza porque te van a dar muy buenos mapas con senderos de trekking.
♦ Torres Svan

En Svanetiaw, las casas se construían con torres de defensa
Son la característica más representativa de la región de Svanetia, elevándose por las colinas para darle ese ambiente legendario a un paisaje ya de por sí inspirador.
Las Torres Svan fueron construidas como fortificaciones de defensa contra las continuas invasiones entre el Siglo VIII y XVIII. Las familias las hacían pegadas a sus casas para refugiarse con su ganado cuando recibían ataques. Vas a ver que en cada piso hay pequeñas aberturas, usadas para tiro, ventilación y hacer guardia.
Apenas te alejes del centro del pueblo vas a empezar a ver estas torres, especialmente en dirección a Lanchvali y Lagami (los puntos marcados en el mapa son solo como referencia). Pero lo mejor de lo mejor está en Ushguli, un pueblito a 40 km. de Mestia declarado Patrimonio de la Humanidad.
♦ Glaciar Chalaadi

¿Algún lugar mejor para hacer un picnic?
Nos persiguió un oso por buena parte del camino, pero pudimos llegar vivos para hacer un picnic mirando al Glaciar Chalaadi y recomendarte que le dediques un día de tu tiempo en Mestia a hacer esta caminata.
Para llegar hasta el glaciar vas a demorar alrededor de 3 horas, dependiendo de cuánto frenes por el camino y si te encontrás con un oso o no. No es una caminata difícil pero llevá buen calzado porque hay varias partes en las que caminás sobre piedra.
Sí, ya sabemos que cuando veas el video que grabamos para dejar un último registro para la posteridad vas a decir «Peeeero, qué exagerados, si es un cachorrito que quería jugar». Bueeeeeno, te quiero ver a vos en ese momento, pensando en que si el cachorrito viene atrás tuyo la próxima en aparecer va a ser mamá osa con otras intenciones.
A la salida hablamos con un guardaparques, que nos contó que era un osezno abandonado que ellos cuidaban y anda siempre «acompañando» a los turistas en la caminata. Si hubiésemos sabido esto antes no nos hubiéramos pegado tanto julepe.
♦ Cruz y Lagos Koruldi

Puede que la cruz no sea lo máximo, pero el paisaje sí lo es
Venir a Mestia es para armar la mochila por el día con algo para comer y salir a caminar. Otro buen plan es ir hasta la cruz (Tskhakvzagari) que está subiendo por las montañas.
Es una dura subida que te va a llevar unas 2 horas por tramo, pero recompensa a la vista y el corazón en todo momento. Cuando llegues a la cruz tenés dos opciones: tirarte en el pasto a descansar antes de volver, o seguir camino hasta los Lagos Koruldi.
Nosotros elegimos la primera opción sin dudarlo porque hasta los lagos son otras 2 – 3 horas más de fuerte subida. Se puede hacer como una caminata por el día pero tenés que empezar temprano.
♦ Mazeri
Si Mestia te resulta más turístico y urbanizado de lo que buscabas, hay muchos pueblos hermosos cerca para pasar el día o quedarte a dormir.
Ushguli es uno de ellos, que además de las Torres Svan que te mencionamos es el lugar habitado más alto de Europa (2100 mts.), si consideramos a Georgia parte de Europa.
Otro es Mazeri, a 20 kilómetros de Mestia. La ubicación en el valle que forman dos ríos, entre praderas, montañas con picos nevados y cascadas, es un sueño. Desde acá empieza el trekking al glaciar del Monte Ushba y varios más, pero aunque no quieras hacerlo, el solo hecho de pasar una noche en el pueblo es incentivo suficiente.
No hay transporte público que vaya directo a Mazeri, pero podés tomar una marshrutka desde Mestia hasta Becho y de ahí seguir a dedo por los restantes 6 km. Como te contamos, nosotros hicimos todos los recorridos por Georgia a dedo, lo cual nos evitó andar preguntando y adaptándonos a los horarios de las infrecuentes marshrutkas o negociando con los taxistas.
Alojamiento
Homestay Campping (eso decía el cartel de la puerta): de la plaza principal donde te dejan las marshrutkas, caminá por la calle pavimentada (Queen Tamar) hasta llegar a otra plaza donde está el Liberty Bank y un kiosco que hace unos khachapuris muy buenos. A mano izquierda vas a ver la Guesthouse Sandro. Caminá por esa calle de tierra (Agmashenbeli) unos 300 metros hasta que veas la casa que te decimos a mano izquierda.
Pagamos 25 Lari entre los dos por habitación privada. No tiene wifi.
(14 David Agmashenbeli, 551147002).
Ahí es donde nos quedamos nosotros y te la podemos recomendar, pero en Mestia prácticamente la mitad de las casas tienen habitaciones para alquilar. Varias de ellas las podés encontrar en Booking, Hostelworld y Agoda si querés ver fotos y leer referencias, y otras solamente caminando cuando llegues a destino porque no figuran en ninguna página,
Si tenés carpa y no hace demasiado frío, podés acampar en muchos patios por 5 Lari por persona.
Qué ver en Georgia: Batumi
En la costa del Mar Negro y pegada a la frontera con Turquía, Batumi es el principal destino de playa de Georgia y tercera ciudad más grande.
También es uno de los principales centros de party party en la región, aunque eso explota especialmente entre julio y principios de septiembre, época que es preferible evitar si querés caminar tranquilo por la costanera y sacarte fotos en las esculturas sin tener que hacer fila en cada una.
No esperes una playa nivel costa del Meditarráneo porque te vas a decepcionar, lo mejor de Batumi es la combinación de ser una ciudad llena de vida, con mucho para hacer y que te da la posibilidad de estar caminando descalzo por la arena en un momento y al otro entre construcciones de su belle epoque que se juntan con las de su época otomana y las ultramodernosas que la plata del turismo y los casinos traen.
Qué ver en Batumi

¿Where? En Batumi
♦ Costanera

Nino, la Torre del alfabeto y la vuelta al mundo
Caminar por la costanera cuando empieza a bajar el sol y las luces colorinche de varios edificios se prenden, es para nosotros el placer máximo de Batumi.
Empezando en el Centro de información turística, tenés unos 7 kilómetros de costa con vista al Mar Negro para disfrutar, pasando por las esculturas que son la foto que nadie se va de Batumi sin sacar.
La más conocida de todas es la de Ali y Nino, una escultura de acero en movimiento (bueno, cuando está prendida), en la que un hombre (Ali) y una mujer (Nino) se entrecruzan y separan, representando la unión que quieren pero no pueden tener.
La historia detrás de la escultura es la que cuenta la novela Ali y Nino, sobre el amor imposible entre un chico azerí de familia musulmana y una princesa georgiana cristiana. Es un clásico del Cáucaso y considerada la novela nacional de Azerbaiyán.
También en el llamado «Miracle Park» está la Torre del alfabeto, que muestra las treinta y tres letras del abecedario georgiano en una doble hélice de ADN, representando la identidad nacional. En la enorme bola de aluminio de la cima (130 mts.) hay un restaurante, pero no alcanza con ir a tomar un café para tener la vista 360, también tenés que pagar para subir.
Por el camino vas a cruzar una serie de esculturas metálicas con corazones para justificar el eslogan de «la ciudad del amor», unas ojotas sobre huevos (sí, como leíste) y, nuestra preferida, WHERE, en el New Boulevard (a unos 3 km. del Miracle Park).
♦ Chacha Tower (Torre del reloj ¿con sorpresa?)
A simple vista, la Chacha Tower parece ser una torre de reloj de estilo islámico más, pero el nombre lo tiene por algo.
Chacha es la bebida alcohólica nacional de Georgia, con estatus que solo supera el «sagrado» vino. Al parecer, el intendente de Batumi dijo unas palabras muy sentidas un día de brindis, comprometiéndose a hacer un invaluable aporte a la ciudad: «Habrá un torre con una fuente, en la que en lugar de agua saldrá chacha, y todos -nuestros ciudadanos, visitantes extranjeros y turistas- tendrán la oportunidad de probar».
Así, en 2012 se inauguró la Chacha Tower con su fuente de la que debería salir el potente vodka/brandy local, peeeeero… no te ilusiones con ir con a rellenar un bidón y llevártelo a la playa, porque el momento en el que sale chacha de la fuente es un misterio que solo los borrachines locales conocen. Algunos dicen que todos los días a las 19 hs. durante diez minutos (comprobamos que no pasa), otros que una vez por semana, otras fuentes más confiables aseguran que hay un vecino bajo tierra abriendo la canilla solo cuando se acercan sus amigos, otros que no sale nunca y el misterio continúa.
Salga chacha de la fuente de la torre o no, no te preocupes que si querés probarla no te va a faltar oportunidad durante tu viaje.
♦ Batumi Boulevard

¿Alguna vez habías visto un edificio con una vuelta al mundo incrustada?
El parque de Batumi Boulevard es un lugar central de reunión.
Como por toda la costanera, lo mejor empieza al atardecer, cuando en la fuente hay un show de luces y aguas danzantes.
También hay un mini-mini-bosque de bambú, que no te hará sentir que estás en el Arashiyama de Kioto pero tiene su onda.
Y sí, viste bien, hay un edificio con una vuelta al mundo incrustada (Batumi Tower Ferris Wheel), que aparentemente es el único en el mundo en tener algo así. La idea era que ahí funcionara la universidad de tecnología, pero parece que le pifiaron a los cálculos del presupuesto y quedó sin completar.
♦ Plaza Europa y Batumi Piazza
El mar, las esculturas y los parques son características que identifican a Batumi, pero sobre todo esta ciudad es una mezcla de arquitectura neoclásica, con edificios futuristas, con otros que no entran en ninguna categoría posible.
Para fines del Siglo XIX, con la construcción de un oleoducto que llegaba desde Bakú y la línea de tren desde Tbilisi, Batumi se convirtió en uno de los principales puertos de la Unión Soviética. Así empezó la belle epoque de la ciudad que dejó un importante legado arquitectónico.
La Plaza Europa y la Batumi Piazza son dos lugares donde podés ver ejemplos de neoclásico, art nouveau y algunos que claramente no tienen nada que ver con esos años.
Uno de los representantes de «arquitectura Star Trek» es el McDonald’s que está frente al parque que tiene la otra fuente con aguas danzantes. Tan curioso como el diseño son las referencias a comida saludable que hay en el interior. No lo ponemos en la sección de comida por razones obvias, pero mientras no te envenenes con lo que venden, está bueno para conocerlo.
Comida

Súper Adjarian khachapuri… súper bomba
La región de Adjara (Ayaria) es famosa por tener la versión más representativa de uno de los platos nacionales: el khachapuri. Preparate para una bomba calórica que no escatima en queso fundido, manteca y huevo.
♦ Según consenso popular, el Restaurant Retro tiene uno de los mejores Adjarian khachapuri de Batumi. Para nosotros estuvo bueno, pero no mejor que otros que probamos.
♦ No le íbamos a dar una chance porque eso de que también se llamara Retro nos sonaba a que estaba queriendo engañar a los desprevenidos que buscaban al famoso restaurante; pero cuando sentimos salir el olorcito de adentro del negocio no nos pudimos resistir. Al lado del Hostel Retro está este puestito que tiene unos khachapuris fabulosos. Nada de restaurante con mozo, acá es para comer algo al paso.
♦ Café Saamo: bar de los que nos gustan; austero, barato, tradicional. Para clavarse un poderoso lobio picante y bajarlo con unas buenas Beer Batumi. Está en la esquina de Abashidze y Tavdadebuli.
♦ Chacha Time: ¿te quedaste con ganas de tomar chacha después de que la torre no largara nada? Lo más probable es que viajando por Georgia en algún momento alguien te invite unas copas, lo cual tenemos que advertirte que pueden ponerse bastante insistentes para que tomes hasta quedar volteado.
Una alternativa bastante más fancy es este bar que lleva la bebida nacional a otro nivel, mixeándola para reversionar tragos clásicos. En la carta vas a encontrar chachito (mojito), chacha tonic (gin tonic) y otros.
Alojamiento
Si estás viajando por Georgia en julio/agosto, tené en cuenta que los precios de alojamiento son más altos porque Batumi es el lugar elegido por muchos georgianos y de países vecinos para sus vacaciones. Reservá con anticipación.
Hostel Retro es en el que estuvimos nosotros. La ubicación es buena, el dueño un copado y es de lo más barato en Batumi.
A diferencia de lugares más chicos en los que muchas familias abren sus casas al turismo, en Batumi para conseguir buen precio es conveniente buscar con anticipación. Podés ver las ofertas para la fecha que pensás viajar en Booking, Agoda y Hostelworld.

«Más amor por favor» – Batumi
Con toda esta información sobre qué ver en Georgia no podés decir que no tenés suficiente material para organizar tu viaje.
Los lugares que fuimos viendo son los que visitamos durante nuestro viaje, lo que no quiere decir que no haya mucho más para descubrir. Nosotros compartimos nuestra experiencia, pero cada viaje es único.
Si tenés alguna duda, actualización, aporte extra o simplemente querés agradecer por el trabajazo que nos mandamos con esta guía, podés dejarla en los comentarios.
¡Buenas rutas!
Realmente es un blog muy útil. Gracias por compartir la información. Blog muy útil. Gracias por una descripción tan detallada del destino.
Georgia se ve fascinante, ya quiero probar esos platillos y ver esos paisajes, sobretodo el parque Rike, que me llamó la atención.
Gracias por compartir.
Estuve en Georgia hace unos años, permanecí una semana en Tbilisi , me llamo la atención que encontré gente que habla español porque vivieron en España, muy llamativos los balcones y arquitectura, la comida muy buena y fui a los baños termales en el centro de la ciudad , son excelentes. En cuanto a BATUMI ; me encantó, su edificación, el Palacio de Tribunales con diseño de botella invertida, el paseo por la costa , la playa no es de lo mejor como mencionan en el comentario. Es una ciudad sorprendente que vale la pena conocerla.
¡Hola, Clara!
Nosotros también estuvimos una semana en Tbilisi, y nos quedamos con ganas de algunas más. Seguramente volveremos en algún momento para pasar un tiempo, aprovechando que podemos estar 365 días sin visa. Que bueno que fuiste a los baños termales; nosotros ya habíamos ido en Estambul por eso no fuimos en Georgia, pero suponemos que deben ser similares.
Batumi nos gustó mucho más de lo que esperábamos, porque no somos muy amigos de las ciudades turísticas de playa, pero como comentamos, la ciudad es mucho más que una playa. Suponemos que de haber ido en época de vacaciones nos hubiésemos llevado otra imagen.
¡Saludos!
Los felicito por la descripción exacta que hacen de este país, ustedes lo recorrieron en forma completa abarcando el interior también. Yo me tuve que limitar por razones de tiempo de vacaciones, venía de estar en Baku, Azerbaiyan y desde ahí Georgia es muy cerca. Como dije Batumi sorprende, entre otras cosas me impresionó el edificio del hotel Sheraton visto desde el exterior , ustedes me hicieron venir a la memoria las 2 esculturas que están en continuo movimiento que no pueden pasar desapercibidas. Batumi lo comparo un poco con Odessa, que es una ciudad balnearia pero tiene mucho para ofrecer, también en el mar Negro , con una calle peatonal hermosa, con carruajes, el magnifico teatro de Opera y Ballet, las famosas escaleras POTEMKIN, en fin son ciudades costeras que da gusto estar en ellas.
Sigan viajando y disfrutando !!!!!!!!!