Imaginate cómo sería tu vida si en lugar de haber nacido en la familia que naciste, hubieses sido una hija no deseada y tu madre te hubiese abandonado cuando tenías un año. Tu papá, deprimido por la situación, hubiese caído en el alcohol y al poco tiempo muerto en un accidente de tránsito. Y si encima de todo esto, tu tía, la única que se hizo cargo de vos, te echa de la casa cuando tenés catorce porque no pasaste el examen del colegio al que ella quería que entraras y dice que no tiene más plata para mantenerte. ¿Qué harías si quedaras en la calle, sin familiares a quienes pedir ayuda, totalmente sola a los 14 años? Difícil de imaginar. Quizás, como a muchos chicos con historias parecidas, la calle te hubiese arrinconado en el callejón más oscuro, el de las drogas, delincuencia y prostitución. Quizás te hubieses dejado estar como un vagabundo, sobreviviendo en una vida sin razón. Depresión, locura, venganza… ¿cómo te ves? No tiene sentido imaginarlo, creo que no vas a encontrar ninguna respuesta lógica a esta hipótesis que seguramente tan ajena es a tu realidad. Si todos pudiéramos ser el héroe que siempre imaginamos, los golpes de esta vida hipotética nos fortalecerían hasta darnos alas que nos permitieran volar para ver la luz. Estos héroes alados son pocos, bien lo sabés, pero cuando la vida nos cruza con uno de ellos, tienen el enorme poder de enseñarnos a creer en los caminos alternativos.
En Vietnam conocimos a una de las personas más inspiradoras de nuestras vidas. Te presentamos a Hotikana, una heroína de 18 años.
Ho Chi Minh City, Hanoi, Halong Bay, Hoi An… los lugares turísticos de Vietnam son muchos, entonces ¿por qué elegiría alguien parar en una ciudad ordinaria como Pleiku? Si nos dejáramos guiar por la Lonely Planet, encontraríamos que Pleiku “puede servir como una parada técnica, pero hay poco que detenga al viajero a quedarse más que unas horas en la ciudad.” Es que esta guía podrá orientarte con los atractivos turísticos más obvios, con templos o lugares para dormir, pero nada sabe de los atractivos que no se ven en la superficie, de esos que no te cobran, que no te dan un tícket de entrada ni te piden nada a cambio.
Claro que Pleiku podría ser sólo una parada técnica como recomienda la Lonely Planet, o ni siquiera eso, tranquilamente podría ser no más que una sucesión de casas, motos y negocios de sopa vistos desde la ventana de un auto que nos haya levantado haciendo dedo. Podría haberlo sido, pero no lo fue. Y no lo fue sólo porque la camarera de una cafetería hizo público en internet su deseo de conocer viajeros. Suena raro, y no parece ser motivo suficiente para elegir quedarse en un lugar salvo que quieras aprender más sobre el café vietnamita. Pero si esa camarera te deja entrever un poco de la historia que lleva detrás, no necesito hacer cafeomancia para saber que seguramente cambiarías de idea.
Le escribimos un largo mensaje, contándole las ganas que teníamos de conocerla. Al día siguiente, nos respondía:
Ah ha,
Hi Daniela and Juan 🙂
It’s great when received your request :). Thank you so much. Of course, I will help you. I think you are a cute couple.
But, my house very small. Very very very small. Ah ha, and I hope you will feel comfortable. Yeah. I think you have sleeping bag. And if you don’t have one, don’t worry, I thinking about it.
Your journey is excellent. Great. I think I will learn a lot from you.
Ok, welecome to Pleiku City.
Hola Daniela y Juan 🙂
Fue genial cuando recibí su mensaje 🙂 Muchas gracias. Por supuesto, los voy a ayudar. Creo que son un pareja tierna.
Pero mi casa es muy chica. Muy muy muy chica. Espero que se sientan cómodos.
Creo que tienen bolsa de dormir. Y si no tienen, no se preocupen, voy a pensar algo.
Su viaje es excelente. Genial. Creo que voy a aprender mucho de ustedes.
Ok, bienvenidos a Pleiku 🙂
No sabemos por qué habrá pensado eso de “pareja tierna”, debe ser por la foto tonta que tenemos como perfil de Couchsurfing. Yo le dije a Dani que la cambiara, pero ella insiste en que esa foto con los gorritos vietnamitas nos hace ver confiables. Sí, tontos y confiables.

Con esta foto de perfil nadie puede desconfiar de nosotros
Pleiku es una ciudad con olor a café. Hay varias cafeterías por cuadra, de las mejores del país. “Me van a encontrar en Café Napoli”, nos había dicho Hotikana. Pensamos que ubicarla no iba a ser fácil, pero parece que Napoli no es una más. Cuando estábamos cerca, mirando para un lado y para el otro con la típica cara de turistas perdidos, viene sonriendo hacia nosotros una chica de largo pelo negro. “¡Hola Juan!”, le dice a Dani y le da un abrazo. “¡Daniel!”, y también me abraza a mí. La confusión de nombres ya no nos toma por sorpresa, porque son más las veces que pasa que las que aciertan. Pero que una chica asiática abrace a un hombre que acaba de conocer, eso sí que es poco común. Lo normal hubiese sido que después de saludar a Dani se quedara parada y me saludara a mí con la mano, sin ningún tipo de contacto físico. A lo sumo me hubiese saludado dándome la mano, si es que yo, incómodo por la frialdad del saludo, hubiese estirado la mía. Este saludo podría haber sido una muestra de particular desinhibición, pero rápido nos daríamos cuenta que esa había sido la primer señal de una profunda necesidad de afecto.
“Vengan, yo trabajo acá…”, nos dice mientras corre una silla para que nos sentáramos en el patio de la cafetería. “Siéntense que les traigo un café…” Eso de que lo mejor para neutralizar el calor es una bebida bien caliente a mí nunca me terminó de cerrar, y menos después de una caminata bajo el sol con las mochilas. Pero si hablamos de buen café, tomarlo frío me parece un sacrilegio más grande que ponerle azúcar al mate (o miel, como hace una pareja amiga de particulares costumbres -Lola andás por acá?-).
Mientras mis papilas gustativas se iban de viaje por la taza del café con más cuerpo y más chocolatoso que hayan probado, ablandando todo músculo dorsal que se me había contracturado, Hotikana era un torbellino de energía. “¡Qué bueno que vinieron! Son los segundos extranjeros que se quedan en casa. Voy a poder practicar mi inglés, y me pueden enseñar algo de español…” De la cartera saca un libro para aprender chino. “… también estoy aprendiendo chino, porque en dos meses va a venir una chica de Shanghai y quiero sorprenderla.” En un país donde hablar inglés es uno de los principales indicadores de estatus social (y qué decir de un tercer idioma), Hotikana es un indicador de que la perseverancia te puede llevar más lejos que la herencia.

El café gotea suavemente desde el filtro de arriba hasta llenar la taza
Tanto tenía para mostrarnos y preguntarnos que los detalles de su vida fueron quedando de lado, relegados por la popularidad que “la camarera de Café Napoli” estaba ganando en el barrio al pasearse con dos “americanos” (legado de la guerra y de Hollywood que quienes no están acostumbrados a ver extranjeros crean que todos son de Estados Unidos). Tampoco queríamos sacar el tema sin tantear el terreno, como quien le pregunta a alguien cómo le fue en las vacaciones.
Doblando en varios callejones, llegamos hasta una puerta verde de chapa. “Les dije que mi pieza es muy muy chiquita…”, nos dice desde el pasillo, dejándonos lugar para que pasáramos a dejar nuestras mochilas. En el piso había un colchón para dos personas con algunos peluches. “Vos podés dormir acá conmigo y mi amiga, y él allá arriba”, le dice a Dani. “Ahí arriba” había un entrepiso de madera, decorado con pósters de carilindos y carilindas del pop coreano, tan popular en todo Asia. “No me gusta la música coreana, pero los puse porque la pared estaba fea”. Esto me retrotrajo a mi infancia, cuando pegaba cualquier cosa que encontraba en revistas para decorar la blanca y aburrida pared de mi cuarto. Tan cualquier cosa como una bandera y un mapa de Andorra, país al que le tenía un extraño aprecio (mi fetiche por los países pequeños empezó desde chico).

Foto de su perfil de Couchsurfing en la que muestra su cuarto, con la frase «My room, only this» (mi pieza, sólo esto)
Los mercados vietnamitas son de los más atractivos que hayamos estado. Lo que más llama la atención no es lo que venden, sino los gorros cónicos que usan las vendedoras. Entre pescados a la intemperie llena de moscas y carnicerías con cabezas de chancho como decoración, cada tanto encontrábamos algo tentador para invitarla a Hotikana. Pero cada vez que queríamos comprar algo, ella no nos dejaba. Al ratito desaparecía y volvía con choclos hervidos o el riquísimo tofu dulce. Le agradecimos una y otra vez, pidiéndole que no gastara más, pero ella siempre nos recordaba la misma frase: “yo no necesito plata para ser feliz”. Y si lo que compraba no era para nosotros, se lo llevaba a algún nene de la calle. “Me gusta comprarle comida a estos chicos, no sé por qué, pero me hace feliz.”
Una relación como la que tuvimos con Hotikana hubiese sido imposible con la gran mayoría de las chicas asiáticas de su edad, generalmente muy tímidas y chiquilinas. En su perfil de Couchsurfing, Hotikana pone: “Yo soy una mala persona. Una mala estudiante. Si sos un buen estudiante, tu mamá no va a estar contenta de que te juntes conmigo”. Estos términos siempre se mezclan en Asia. Si sos buen estudiante, sos buena persona. De los malos alumnos, mejor alejarse. Puede ser que ella no memorice y repita como el sistema de educación asiático aplaude, pero qué “buen estudiante” de su edad te dice que le encanta leer a Jack Kerouac, Allen Ginsberg y todo lo que sea de la Beat Generation. “No necesito plata para ser feliz”, sin dudas una mentalidad muy Beat.

Paseando por las calles de Pleiku

Comiendo el delicioso tofu dulce
Con el atardecer en su hora más pasional, las cafeterías se llenan de parejas y grupos de amigos. Nosotros la seguimos a ella, camino al templo más grande de la ciudad, mientras la charla nos va llevando a temas más serios. “Sos la persona más joven con la que nos quedamos”, le comentamos. “Si, los que están en Couchsurfing son más grandes, o viven con sus padres.”
“Si, es verdad. Pero vos vivís sola desde muy chica…”
“Si, desde que tengo catorce. Mi mamá me abandonó y mi papá se murió en un accidente al poco tiempo. Mi tía se hizo cargo de mí y de mi hermana, pero nunca me llevé bien con ellas.”
“Entonces tu tía te echó de su casa…”
“Sí, porque decía que no tenía plata para mantenernos a las dos. Yo no quería ir al colegio que ella quería que entrara, entonces no pasé el examen de ingreso a propósito. Eso la enojó mucho y tuvimos una pelea muy grande. Ahí fue cuando me echó.”
“¿Y tu hermana que hizo?”
“Nada. Por eso es que con ella tampoco hablo.”
“¿Y a dónde fuiste cuando quedaste en la calle?”
“Primero a lo de una amiga, pero tampoco me podía quedar en su casa. Estuve ahí hasta que conseguí trabajo en un café y pude alquilar una pieza. Después aprendí algo de inglés y pude conseguir el trabajo en Napoli, donde pagan más, y también uno como freelance en un diario local, escribiendo historias de inspiración para jóvenes .” No es que a las cafeterías de Pleiku vayan muchos turistas y sea necesario tener personal bilingüe, ni que el diario de Pleiku publique historias en inglés, pero como te dijimos, hablar inglés es sinónimo de persona educada, y eso de persona confiable y respetable.
“¿Nunca más volviste a hablar con tu tía?”
“Me llama para pedirme plata. Ahora que cobro un sueldo dice que le tengo que devolver todo lo que ella gastó en mí durante los años que me mantuvo. Pero yo no quiero hablar con ninguno de mis familiares, me hicieron sufrir mucho durante muchos años.”
Esa noche nos pidió que la acompañáramos a su trabajo. Era el día de pago y tenía que hablar con la jefa a la que tanto miedo todos le tienen. Si la veía con nosotros tendría que hacerse la simpática. Muy inteligente, Hotikana nos presentó ante la jefa y su novio (de turno) cubano. Nos invitaron unos tragos y nos quedamos hablando por un rato. Que su empleada, una mocosa huérfana de 18 años, tenga amigos extranjeros y hable inglés frente a ella, que no entendía nada de lo que decíamos, fue una humillación enorme para una empresaria de clase alta.
La simpatía le duró lo que duró la reunión, porque cuando las dejamos solas pasó lo que nos dijo que pasaba todos los meses. “No le pagó a nadie, dijo que no tenía plata”. Se la notaba triste, pero igualmente seguía frenando para contarle a los curiosos quiénes éramos y de dónde nos conocía. Cuando estábamos haciendo una conversación de señas con un viejo medio loco que pateaba un pelota imaginaria al grito de «¡Maradona!», pasa una moto por al lado con el cubano y la jefa. Nos saludan tocando bocina y siguen contentos, a gastarse la plata de los empleados.
Me fui a dormir, mirando a los coreanos de la pared. No me acuerdo qué soñé, o si soñé algo. Pero me acuerdo lo que pensé y sigo pensando. La prueba más dura para Hotikana parece haber pasado. A partir de ahora puede lograr lo que se proponga.
Hace unos días nos enteramos que su gran sueño se está cumpliendo. Hotikana dejó Pleiku y abrió sus alas para empezar a volar. Esto es una parte de lo que nos escribió:
… What a coincidence!!!! I wanted to message you too and tell you something. But you did that first.
Yes, I’m travelling all over Vietnam by hitchhiking because of you!! Yesssss, You are inspiring to me. Then I will go around Asia and Africa! Now I’m in HCMC to earn money and then I will continue traveling. I’m so happy 🙂 …
… Qué coincidencia!!!! Quería escribirles un mensaje yo también para contarles algo. Pero ustedes escribieron primero.
Sí, estoy viajando por todo Vietnam a dedo gracias a ustedes!! Síiii, ustedes son una inspiración para mí. Después voy a viajar por Asia y África! Ahora estoy en Ho Chi Minh City para ahorrar algo de plata y seguir viajando. Estoy muy feliz :)…
“Creo que voy a aprender mucho de ustedes”, nos había dicho antes de conocernos. Hotikana pudo haber aprendido de nuestros consejos para viajar a dedo, pero nosotros aprendimos que la confianza en uno mismo y la perseverancia son los mejores consejos para viajar por la vida.
“Las mujeres son como un saquito de té, no sabés que tan fuertes pueden ser hasta que no las ponés en agua caliente.” – The little coffee shop of Kabul –
Hola chicos! Que emotivo el relato, me encanto. Los sigo leyendo, un gran abrazo a los dos!
Muy muy linda historia! Me puso la piel de gallina, y me emociono mucho.
Aca en Buenos Aires la recibo cuando quiera!!! Un beso a ustedes, me ENCANTA su blog
vustra historia es conmovedora, es toda una lección de vida sin duda una experiencia enriquecedora para ambos.
Hoticana tiene lo que hace falta para ser un ganador en la vida perseverancia y muchas ganas de vivir.
Me hace acordar a una frase de ALMAFUERTE, ¨Si te caes mil veces te levantas otras mil
que suerte de poder cruzarte con gente así en la vida.
Mucha suerte en su travesia.
Bueno, igual que otros aquí, me ha emocionado mucho la experiencia que compartis vivida con ella y la actitud que Hotikana tiene ante la vida. Es el tipo de personas que te hacen crecer y con las que a veces las palabras sobran y los silencios hablan. Después de varios caminos de Santiago en los últimos 12 meses y haber tenido la suerte de que la vida me cruzase algunas de esas personas tan especiales estoy a punto de emprender nuevos y más lejanos caminos. El 23 de noviembre vuelo a Bangkok sin billete ni fecha de regreso para conocer esos paises que vosotros dos ya teneis recorridos a veces en más de una ocasión. Y desde ya y gracias a vuestro post, intentaré localizar a Hotikana. Es alguién con quien me gustaría poder compartir tiempo. Creo que está en Ho Chi Min, a ver si tengo suerte.
También quiero aprovechar para daros las gracias y felicitaros por el trabajo que hacéis en este blog.
Seguro no será la última vez que escriba.
A seguir disfrutando de cada atardecer…
Hola Andreu, ¿cómo andás? Muchas gracias por tu mensaje. Nos alegra muchísimo que te haya inspirado la historia de Hotikana, y más aún que estés por emprender un viaje y que la quieras conocer.
Esperamos que vuestros caminos se crucen.
¡Muchos éxitos!
Amazing!!!!
Me encanta la historia!!!! Lo mejor de viajar es que encuentras las mejores aventuras donde menos las esperas
Hola Dany y J!
ya es el tercer mensaje en menos de 24 hs que les escribo, y es que el sábado parto para el sudeste y estoy en maratón de lectura mientras trabajo!
Me pueden pasar por privado más info sobre Hotikana y su actual paradero si lo conocen?
Quizás pueda encontrarla estas próximas semanas.
Si saben que su linda historia continuó de aventuras,tener un update para todos a quienes nos ha conmovido la historia nos daría más esperanza, sin querer ser invasiva ni entrometida en su intimidad, aclaro con énfasis, respetando su privacidad ante todo.
Gracias!
Hola Susana! Ahí te escribo por privado. Saludos!!
J y Dani, realmente emotiva la nota de Hotikana. Un ejemplo de lucha. La contacte por CS para inspirarla a que continue viajando y ojala cuando este en HCM la pueda invitar a un almuerzo o una cena. Me llevo la frase “Las mujeres son como un saquito de té, no sabés que tan fuertes pueden ser hasta que no las ponés en agua caliente.”
Dios los bendiga enormemente y puedan seguir bendiciendo y ayudando a los demas a tomar decisiones para ser felices. Un abrazo grande. Eve de Rosario, Argentina
Hola Eve! Muchas gracias por tus hermosas palabras! Qué lindo que pudiste contactar a Hotikana, gran guerrera de la vida. Esperamos que la puedas conocer en persona.
Te mandamos un fuerte abrazo y muchas gracias por la buena onda!
Que maravillosa historia. Gracias por compartirla es hermosa, reinspiradora. Bendecidos ustedes de haber conocido a esta guerrera linda.
Muchos saludos y muchas gracias de verdad no saben cuanto ayudan a muchos a agarrar fortaleza y seguir perseverando.
Hola Diana! Sí, Hotikana es una guerrera de la vida a quien tuvimos el honor de conocer.
Te mandamos un abrazo enorme desde Turquía y muchas gracias por la buena onda!
Chicos,la verdad estas historias me ponennla.piel de gallina,me hace sentir un boludo antes pequeñas cosas del dia a.dia,me.podrian pasar el mail(por privado) de ella asi le escribo y por ahi quien dice nos cruzamos viajando,gracias
Hola Leandro! Ahora te escribo por privado. Saludos!
Muy admirable la historia! Una guerrera de 18 años que sigue adelante a pesar de todo. ¿Tienen contacto aún con Hotikana?
Saludos chicos!
Sí, nos mantenemos en contacto con ella por facebook, sigue viajando, ahora por India y Nepal.
Abrazo!
🙂 Como siempre un placer leerlos, admiro realmente a esas personas que van tras sus sueños.
Wow! Hermosa historia, si ella les aprendió algo a ustedes, todos los lectores le aprendimos muchísimo a ella. Gracias por compartirlo
Wow wow wow, ¡qué hermosa historia chicos! Realmente este es el tipo de personas (y ciudades) donde seguís reafirmando una vez más que lo mejor de los viajes son las historias que uno se cruza por ahí. Qué increíble, qué inspirador, qué hermosa forma de pensar!
Sigan juntando historias y compartiéndolas =)
Hola Nati!!! Totalmente de acuerdo!!!
Vos también estás cruzando gente 100% inspiradora! Ojalá nuestros caminos se crucen pronto!
Abrazo grande!!
Una admirable historia, hay gente que nos toca muy profundamente, no?
Totalmente, hay personas que con sólo unos días junto a nosotros, nos dejan su huella para siempre…
Es una linda!!!! Son esas personas que hacen bien… Que nivelan para arriba. Dios le de todo lo que desea desde su corazón..
Hola muchachos!!! Como es de bella la naturaleza así también lo es el ser humano cuando decide que así sea… es cierto existen muchos monumentos y edificios y espacios para el turista que están bastante alejados de lo que realmente sucede con la vida, más allá de eso, para mi el viaje es esencialmente experiencia, intercambio…que bella niña es Hotykana!Hermoso regalo que nos han hecho una vez mas!…Agradecida profundamente!!!
Carola
(Puerto Varas,sur de Chile)
Chicos me encantó la historia! Muy lindo conocer a través de ustedes a esta personita que con tan poca edad tiene tanto por enseñarnos!
Les mando un beso grande!
Que bella historia, tomando inspiración para viajar por el mundo, espero que le vaya muy bien a Hotikana y a ustedes!
Super inspirador, una niña que da ejemplo, que fuerza. Éxito en su viaje y sigan dejando algo en cada una de las personas que conocen.
Realmente conmovedor… La historia de Hotikana nos ayuda a ser mas humildes, a darnos cuenta que podemos aprender tanto de las personas, incluso cuando creemos que a los 18 has vivido tan poco. Las coincidencias no existen y gracias a que sus caminos se cruzaron ella emprendió su viaje y ustedes comparten su historia con el mundo. Gracias chicos por inspirarnos siempre!
Increible historia chicos, me encanto….
Ah yo tambien le pongo miel al mateeeee
Saludos
Noooo señorita Sariri, por favor!! Encima que nos engañaste vilmente en Melaka diciendo que ibas a llevar mate a la plaza y te lo olvidaste!!… ahora nos venimos a enterar que le ponés miel al mate, será posible!! jajajaja. Igualmente confieso que el 1er paquete de yerba que me compré con mi plata (Jota), a los 12 años, fue una CBSé saborizada con miel. Desde ése día que me quedó un gran trauma con este mezcolete empalagoso!!!
Besos y abrazo al gran Chancho Valiente!
qué gran historia de vida! Sinceramente admiro ese coraje que Uds y Hotikana tienen! Yo con tantos sueños de conocer países, sus paisajes, su gente y culturas viajando pero no sé como o por donde empezar y menos con poco dinero. Ojala algún día pueda. Los admiro por su gran valentía! besitos y éxitos en sus próximos destinos! desde Paraná, Entre Ríos, Argentina.
Ojalá Hotikana empiece a tener la vida que se merece y sea muy feliz. Qué suerte que hayan parado en ese lugar y hayan podido conocerla, gran historia de vida. Besos!!
Hermoso!!! que lindo final de relato
y a uno que le da miedo salir 🙁
No debe haber nada más lindo que inspirar. Y ustedes inspiraron e inspiran libertad .
Gracias por compartirlo 🙂
Del encuentro entre la «cute couple» que le da la espalda a tantas cosas establecidas para ser feliz y una persona tan valiente, salen cosas como estas. No me extraña. El coraje, la libertad y el empuje se potencian.
Chicos que lindo, lloré con la historia. Por Hotikana y sus fuerzas para salir adelante y también por lo lindo que llevan a cada lugar.
Abrazo!!!
Excelente post! Muy inspiradora historia.
saludos chicos
Excelente, excelente post y gran historia de vida!
Me encantaría poder conocerla y aprender de ella también! Cuando vuelvan a escribirle, mandenles saludos míos y diganle que la admiro 🙂
Besos chicos!
Chicos,
Realmente me encantó el relato. Muy sentido. Ojalá pueda cruzarme en mi viaje con estas personitas especiales que tanto hacen falta en este mundo.
que diossssssssss la bendiga aquí tienes un pana mas para que te apoye saludo desde Venezuela mochilero de Venezuela